‘Aquiles’ fue hallado herido en una de las calles del corregimiento de Irra, del municipio de Qunchía, Risaralda, por Valentina Guarín Patiño, una activista de la Fundación Animal Estoy Contigo, quien, al ver la condición de salud de la mascota, lo llevó hasta una clínica veterinaria de Manizales.
La mascota permaneció durante varios días en una Unidad de Cuidados Intensivos de este centro veterinario, donde murió el pasado sábado en la noche, por la gravedad de las heridas que tenía su cuerpo.
«El perrito fue víctima de abuso sexual en la madrugada del 27 en Irra, Risaralda, cuando apareció en una finca, en un estado muy lamentable, estaba muy lastimado, estaba sin poder caminar y fue ahí cuando lo trasladaron a la clínica veterinaria. Aquí se le hizo una radiografía que evidenció que no volvería a caminar si se recuperaba”, expresó la veterinaria.
Aquiles tenía dilatación anal y sangrado, por lo que no podía incorporarse al ambiente, además presentaba dolor marcado sobre la columna, y no respondía a estímulos externos y no controlaba ningún esfínter, producto que sufrió, tras ser víctima de un ser humano.
Este perro criollo no solo fue abusado sexualmente, sino al conocer los resultados de una radiografía arrojó una subluxación de vértebras lumbares, cerca de la base de la cola. Esto, a un golpe seco recibido sobre esta zona, que pudo ser perpetrado por su abusador.
La Fiscalía General señaló que «rechaza el hecho atroz y demencial que ocurrió con Aquiles, el canino presuntamente abusado sexualmente en Irra, corregimiento de Quinchia Risaralda».