En días pasados se había presentando un incendio forestal cerca al Parque Wisirare, y ayer 13 de marzo, este se reinició nuevamente.

El cuerpo de Bomberos de Orocué, luego de varias horas de trabajo lograron liquidar por completo esta emergencia ambiental, la cual afectaba el parque y un resguardo indígena.

Sin embargo, las llamas alcanzaron a consumir el patio de una casa del Hato San Miguel, allí atendieron ocho unidades de bomberos, un vehículo, cuatro motos y herramientas manuales.

El incendio dejó 1000 mil hectáreas más de sabana, bosque y morichales, para un total de 6000 mil hectáreas consumidas.

Mientras el personal de bomberos atendían esta emergencia, en la vereda Remolino en jurisdicción de la granja, se estaban originando otros incendios, los cuales gracias a la lluvia que sé presentó ayer en la tarde, fueron eliminados.

Por redaccion

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *