Más de tres horas a pie debía recorrer Juan Esteban González Monsalve de 12 años, para llegar hasta su escuela en una vereda aledaña al sector de los Curos en Piedecuesta, Santander.
El pequeño, por causa de la pandemia tuvo que caminar entre trochas y carreteras empedradas para llegar a recoger las guías de los profesores para así desarrollar los trabajos y cumplir con los deberes académicos, ya que no cuenta con el servicio de internet en esta vereda.
Hace más de una semana, en medio de su travesía para llegar a la recoger las guías, Juan Esteban se encontró con un grupo de Policías que patrullaban el lugar en bicicletas y les contó que su sueño era tener una de esas (bicicletas) para poder llegar a la escuela.
Luego de varios días y con gestiones y recursos propios, los patrulleros a los que Juan les contó su historia, decidieron darle una sorpresa a este infante y le compraron una bicicleta al menor para que llegue a su escuela más rápido.
El pasado fin de semana, los agentes recorrieron con sus ciclas en hombro la vereda de Curos, hasta llegar a la casa del pequeño y allí con todas las normas de bioseguridad y distanciamiento celebraron su cumpleaños.
“Te traemos la bicicleta que te va a ser útil para llegar por tus trabajos, pero que también puedas ser un gran deportista, que, así como admiras a Nairo Quintana, también puedas llegar a representarnos en todo el mundo. Acá te traemos tu caballito de acero, tu sueño hecho realidad”, indicó uno de los patrulleros.
Juan Esteban se comprometió con los policías a llevarles las guías a sus compañeros que viven en veredas cercanas, quienes también deben recorrer horas de camino para poder estudiar en medio de esta pandemia.