En una diligencia de allanamiento y registro, funcionarios de Policía Judicial de la Unidad de Investigaciones Especiales del CTI, en apoyo con el Ejército Nacional, lograron, y por información de la DEA, lograron ubicar y destruir un mega complejo cocalero en el municipio de Cumbitara, Nariño, al parece, perteneciente al Grupo Armado Organizado, Eln.
Hasta el lugar, llegaron los funcionarios del CTI y el Ejército con caninos antiexplosivos quienes transitaron cerca de 800 metros, hasta el laboratorio clandestino, donde se encontraban integrantes del grupo armado, que al notar la presencia de las autoridades, abrieron fuego con tiros de fusil, enfrentamiento que duró varias horas; sin embargo, no hubo funcionarios ni soldados heridos.
En este laboratorio, se hallaron seis estructuras de madera y tela negra destinadas para el bodegaje, procesamiento, secado, empacado, que además servían de dormitorio y cocina. Al menos 500 metros cuadrados eran utilizados para realizar el procesamiento de la cocaína.
De acuerdo con la información de la Fiscalía, señaló que «los investigadores determinaron que, al mes, se procesaban cinco toneladas de cocaína en ese complejo, y que posteriormente el GAO Eln presuntamente las enviaba a Centroamérica para carteles mexicanos, los cuales las comercializaban en los Estados Unidos».
En este laboratorio, el cual estaba en pleno funcionamiento en el momento del allanamiento. Se conoció que por lo menos 35 personas trabajaban allí, además, para el acceso a este lugar, fue construida una carretera que permitía que los camiones transportaran los insumos químicos, combustibles, la pasta base de coca y otros materiales requeridos para la actividad ilícita.
Durante el operativo, fueron incautados 1.625 kilos de clorhidrato de cocaína macerada, 720 kilos de cocaína solida lista para empacar, 325 kilos de pasta base de coca, 944 galones de acetona, 1.584 galones de ácido sulfúrico, 1.122 galones de ácido clorhídrico, 330 galones de cloroformo, 250 kilos de soda cáustica y 350 kilos de permanganatos.
Las autoridades indicaron que no hubo personas capturadas. Entretanto, el laboratorio fue destruido de acuerdo a las normas legales vigentes, y el producto del registro, allanamiento, destrucción y decomiso fue objeto de control de legalidad por un juez de garantías.