Ante un inminente incremento al precio del Diésel en el mes de julio, la Cámara Intergremial del Transporte, UNIDOS, anunció que se opone al aumento de este combustible que representaría más del 40% de sus costos operativos en el país y se declaran en máxima alerta.
En días pasados, la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, anunció un nuevo incremento de $600 en el precio de la gasolina en Colombia. Con esta decisión, la funcionaria aseguró que se está buscando reducir aún más la deuda que tiene el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles.
La Cámara que representa a los transportadores de carga como la Asociación Colombiana de Camioneros, la Confederación Colombiana de Transportadores, Colfecar, Defencarga y Fedetranscarga, fue quien realizó el pronunciamiento.
Con la posibilidad abierta de que el diésel pueda subir hasta los 18.000 pesos, para equipararse con el precio internacional de ese combustible, la Federación de Empresarios del Transporte de Carga (Fedetranscarga) elevó una petición al Gobierno para detener ese aumento.
“Hoy el sector del transporte de carga y el sector transporte de pasajeros nos encontramos en máxima alerta debido al aumento de los precios del Diesel en el país a partir del segundo semestre de este año”, dijo el vicepresidente de Fedetranscarga, Arnulfo Cuervo.
Afirmó, que este aumento está determinado por el desmonte que quiere hacer el Gobierno Nacional del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles. De acuerdo con un trino en la cuenta oficial de la Federación, esta solicita no aumentar el precio del diésel “hasta tanto no se revise la fórmula con los técnicos del Ministerio de Energía”.
Recordó, que la existencia de este fondo ha protegido la capacidad adquisitiva de todos los consumidores colombianos. Ha permitido que podamos ser más competitivos, tanto en mercados nacionales como a nivel internacional.
De igual manera, el Ministro de Hacienda Ricardo Bonilla advierte que con cada $1.000 pesos que se aumente el precio del diésel, se incrementa en un 4 % el costo de la canasta familiar, debido a que la mayoría de los automotores que transportan los alimentos a diferentes partes del país funcionan con diésel.
Por su parte, el presidente la Asociación Colombiana de Camioneros, ACC, Alfonso Medrano, dijo que en octubre habían llegado a un acuerdo con el presidente Gustavo Petro, que no se subiría, hasta tanto, no se revisara la fórmula del precio de los combustibles. Por lo tanto “nosotros los transportadores de carga no vamos a aceptar un nuevo precio, hasta tanto no se revise la fórmula como lo habíamos convenido”.