Mientras el país se mantiene en la incertidumbre de si se permite la exploración de yacimientos de hidrocarburos y el Gobierno se enreda en la transición energética, a la vista aparece la disminución de crudo. Sin embargo, informes recientes indican una posible disminución en estas inversiones, lo que podría afectar las proyecciones futuras del sector.
La inversión en la exploración y producción de hidrocarburos en Colombia es un pilar fundamental para la seguridad energética del país y su estabilidad fiscal.
La Asociación Colombiana del Petróleo y Gas (ACP) en su último informe ‘Tendencias y Perspectivas del Sector Petróleo y Gas en Colombia’, advirtió las consecuencias que tendría el país por una menor producción de hidrocarburos, así como un contexto global, y recomendaciones para el sostenimiento de la seguridad energética y fiscal de Colombia.
Uno de los problemas para el país es que entre 2027 y 2035 van a dejar de entrar a las finanzas de la Nación más de $40 billones, esto por concepto de recaudo de impuesto de renta, regalías, derechos económicos y otros impuestos.
Inversiones en exploración y producción
Según el informe, en un contexto en el que el mundo retomó el impulso a las inversiones en la industria de hidrocarburos a niveles que no se veían desde 2011, y en el cual Latinoamérica se consolida como un jugador protagónico, Colombia tiene potencial para continuar siendo autosuficiente en petróleo y gas, y, con ello, seguir generando beneficios económicos, sociales y ambientales a las regiones. No obstante, la proyección de las inversiones en el país, tanto en petróleo como en gas, tiende a la baja, lo cual coincide con el estado actual de sus reservas.
En 2023, en el país se invirtieron USD 1.050 millones en exploración de petróleo y gas, 19% menos que en 2022 (USD 1.290 millones), principalmente debido a retrasos en trámites ambientales y dificultades para operar relacionadas con bloqueos a las operaciones y deterioro de las condiciones de seguridad en las regiones. En producción se invirtieron USD 3.780 millones, 5% superior frente a 2022.
Para 2024, estima una inversión total en exploración y producción de hidrocarburos de USD 4.600 millones, lo cual representa una caída del 5% frente a 2023. En exploración, de USD 1.100 millones, y en producción, de USD 3.500 millones; sin embargo, a la fecha se han perforado 11 de los 40 pozos exploratorios proyectados, lo indica que la meta de inversión en exploración no se cumpliría.
En cuanto a producción, en petróleo se estima un promedio de 780 -790 kbpd, y en gas, un potencial de producción de 1.020 MPCD. En materia de reservas, las de gas han caído un 58% en los últimos 12 años, y la vida útil de las de petróleo está cambiando su tendencia, ahora a la baja. De manera que, los niveles de reservas no son suficientes para garantizar, en el mediano y largo plazo, la sostenibilidad energética y fiscal del país.
Frente a este panorama, Frank Pearl, presidente ejecutivo de la ACP, explicó que, “la única manera de incrementar la producción de hidrocarburos de manera sostenible es a través de exploración, la cual se refleja en incorporación de nuevas reservas: sin exploración no hay reservas y sin reservas no hay producción. Para lograrlo, Colombia cuenta con empresas que continúan apostando por el país y sus regiones; y desde la industria nos mantenemos abiertos a trabajar de la mano con el Gobierno para garantizar la seguridad energética de los colombianos”.
En ese sentido, es importante tener en cuenta que, de los 297 convenios y contratos firmados con la ANH, a junio de 2024, 90 se encuentran con fase exploratoria en ejecución, a los cuales se estima que corresponden 110 pozos exploratorios pendientes de ser ejecutados entre 2024 y 2030; con ello, sin nuevos incentivos a la exploración, en 2030 finalizaría la actividad exploratoria en el país.