Erika Gisell Parada Moyano, madre del bebé recién nacido que fue encontrado sin vida por la autoridades dentro de una bolsa plástica y con aproximadamente 10 heridas con arma blanca en tórax y abdomen, envuelto en sabanas dentro de una bolsa negra en una residencia del centro poblado de Canaguaro, en el municipio de Granada, Meta.
«De acuerdo con la información de la Policía Meta, este hecho ocurrió el día jueves 11 de febrero, el cual está siendo investigado por las autoridades para esclarecer lo que pasó», indicaron en ese momento las autoridades.
La joven de 20 años que se encontraba en delicado estado de salud en el Hospital Departamental de Granada, negaba haber estado embarazada, pero los exámenes médicos determinaron que Erika tenía un embarazo a termino completo con parto espontaneo pero casero.
«El pasado 10 de febrero, la joven dio a luz y al no recibir atención médica, su cuerpo se desangraba por lo que fue internada en la Unidad de Cuidados Intensivos y fallece en la noche del domingo 14 de febrero», indicó el personal médico.
Las autoridades continúan con las investigaciones del caso donde Erika era la principal sospechosa del homicidio de su pequeño.